Con esta campaña, ANPE quiere visibilizar la importancia de la ENFERMER@ ESCOLAR en los centros educativos, puesto que son el personal cualificado para realizar las medidas de prevención, detección de síntomas y control de rebrotes ante el COVID-19. Por estas razones, el servicio de enfermería escolar, no es un lujo sino una necesidad.
La OMS, a su vez, ve favorable la incorporación del servicio de enfermería escolar en los centros educativos, cosa que desde ANPE siempre hemos defendido y ahora con la propagación del COVID-19 se hace mucho más necesario de cara al inicio del curso.
Además, debemos recordar que UNICEF señala que son prioritarios los derechos del menor y dentro de esos derechos hay dos que son innegociables, el derecho a la salud y el derecho a la educación, que son el motivo de la campaña.
ANPE seguirá demandando la adecuación de espacios, disminución de ratios, aumento de las plantillas del profesorado y un plan de digitalización que compense la enseñanza presencial. Puesto que, si algo nos ha enseñado esta pandemia, es que la figura del docente es insustituible y que la enseñanza pública nos iguala a todos. Por eso, pedimos que la vuelta a las aulas se produzca con las mayores garantías de salud posibles.